Cursos Certificados y formación complementaria
La Formación General en Diseño Humano que cuenta con el aval de la IHDS ® está organizada de manera que el alumno pueda asimilar el conocimiento de forma integral, orgánica y consistente.
Este programa propone un orden lógico y progresivo de aprendizaje comprendido en tres cursos: Vivir tu Diseño, ABC del Rave y Cartografía del Rave, estructura planteada por la IHDS, escuela fundada por el creador de la ciencia del Diseño Humano, Ra Uru Hu. (Más información en la sección “¿Por qué hacer la formación oficial en Diseño Humano?” de esta página).
En este plan de estudios, los alumnos aprenden primero a aplicar el diseño a sus propias vidas, comprendiendo así la materia a través de la empiria y su propia experiencia, seguido de conceptos teóricos más avanzados, y finalizando con la interpretación técnica de las lecturas, con lo que podrán finalmente aplicar esta ciencia para otros.
El aprendizaje del Diseño Humano es complejo y fácilmente puede resultar confuso para los alumnos más nuevos, pero estoy convencida de que no tiene por qué ser así. Mi rol como profesora y guía es acompañar de forma correcta a mis alumnos, teniendo en cuenta sus necesidades individuales de aprendizaje y formando en ellos una base de entendimiento que les sirva para absorber los conceptos más complejos. Te invito a leer «Mi rol como profesora y guía» más abajo, para que te cuente más sobre cómo llevaremos a cabo este importante proceso.
Ra Uru Hu —fundador del Sistema de Diseño Humano— estableció un programa de estudios que da estructura y orden a la formación oficial en Diseño Humano, que es la que estipula la Escuela Internacional de Diseño Humano (IHDS) y que se corresponde con el currículo que encontrarás en este sitio.
El Diseño humano es una ciencia lógica vasta y compleja, al alimentarse de varias ciencias ya establecidas. Para lograr su entendimiento, la práctica de sus conceptos es tan necesaria como su estudio, ya que es una ciencia cuyo impacto en la vida de los seres humanos es grande, pero no puede ser comprendida de lleno sin un entendimiento profundo de dichos conceptos. Sin embargo, una vez que son asimilados, el beneficio de su aplicación puede cambiar la vida del usuario. (Ver Reseñas)
Seguir esta estructura y orden específicos es crucial, ya que lleva los contenidos de la ciencia a los estudiantes de una manera orgánica. Primero absorbiendo los conceptos para aplicarlos en sí mismo (similar a cómo los estudiantes de psicología utilizan psicoanálisis en sí mismos, para poder primero comprender cómo se utiliza la herramienta correctamente), luego llevar estos conceptos a la práctica (a través del ABC del Rave) y, una vez aprendidos e interiorizados correctamente los conceptos en uno mismo, ya es seguro transmitirlos a otros, a través de lecturas.
Es muy habitual que las personas que entran en contacto con el sistema (a través de la experiencia de un conocido, de la información disponible online, o incluso de bibliografía, cuando esta no está dirigida a principiantes) se sientan un poco abrumadas o desorientadas a la hora de discernir qué es lo que importa fundamentalmente y qué aspectos del conocimiento son complementarios y accesorios, cómo se conjuga una cosa con otra, qué tiene que ver un aspecto con el otro, qué es realmente cada elemento que se describe… En pocas palabras, no se entiende demasiado o se malentiende, restringiendo así la profundidad y alcance que es posible e imposibilitando que se experimente el verdadero entendimiento del sistema y, por consiguiente, de ti mismo/a. Al ser el Diseño Humano una herramienta que tiene tanta importancia en el funcionamiento del ser humano es importante seguir paso a paso el esquema de aprendizaje, de lo contrario, nos arriesgamos a realizar cambios en nuestros comportamientos basados en interpretaciones erróneas de la teoría que podrían desestabilizar completamente nuestra vida. ¿Estás lista/o para comenzar a aprender de la mano de profesionales de la IHDS? ¡Inscríbete aquí!
Enseñar es mi vocación. Soy maestra y, como tal, asumo la responsabilidad de entregarme por completo a la tarea para que mis alumnos aprendan.
Suscribo a tener un aula para cada curso y a la clase impartida en vivo, porque yo misma aprendo mientras enseño. No encuentro satisfacción en entregar material grabado previamente, desentendiéndome del proceso de aprendizaje de mis alumnos, sin ser consciente de qué es lo que entienden o no entienden.
Mi forma exige que comparta el proceso con ellos, que emprendamos juntos ese camino. Me da igual si ya he repetido mil veces la misma teoría. Para mí, cada grupo tiene una identidad propia y yo respondo a ellos adaptando y personalizando mi forma de enseñar, atendiendo las necesidades de cada uno en cada momento. Los conozco, sé quiénes son, me sé sus diseños de memoria, hago seguimiento de lo que les va pasando, doy lugar para la interacción y la participación. Así, cada vez que enseño un curso, es una experiencia distinta, nueva, única.
Me gusta la vieja escuela, incluso si se desarrolla en una plataforma online. Amo entrar al aula y encontrarme con ellos allí, en la clase como se hizo toda la vida, creando ese ambiente de confianza. Ese compartir, para mí, es vida.
Sostengo y trabajo en pos de una educación desde el amor, que considera al ser humano y su contexto, y atiende sus necesidades. Construyo con mi dedicación un ambiente amable y de confianza, pero sin por ello faltar a la verdad mecánica que es la base de lo que enseño, al método que he comprobado que funciona y al patrón de nuevos hábitos que se ha de fijar para que el experimento sea exitoso y mis alumnos descubran su verdadero ser.
Por último, a través del tiempo, yo también me voy transformando, voy aprendiendo y perfeccionándome en mi rol. Todo el tiempo. Continuamente.
El Diseño Humano está vivo en mí, en mi propia forma de vivirlo, y así lo transmito: vivo y en vivo.
Nadia Soso
Analista & Profesora de Diseño Humano
certificada por la IHDS
Formación oficial en Diseño Humano (IHDS)